Introducción
Una planta de cannabis sana tiene un color verde equilibrado, hojas vigorosas y tallos firmes. Pero cuando algo falta en su nutrición, lo comunica de forma muy visible: amarillamiento, manchas, deformaciones, crecimiento lento, entre otros.
Este artículo te enseña a identificar los síntomas más comunes de deficiencias nutricionales, cómo diferenciarlos de otros problemas como plagas o riego inadecuado, y cómo corregirlos de manera orgánica y sostenible para mantener la calidad terapéutica de tu cosecha.
Las carencias no siempre ocurren porque “no hay nutrientes”, sino porque:
El pH está desequilibrado y la planta no puede absorberlos
El sustrato está pobre en microvida
Hay exceso de sales, cloro o compactación
El riego es deficiente (por exceso o falta)
Se usan fertilizantes inadecuados o mal equilibrados
Nutriente | Síntoma visible | Solución recomendada |
---|---|---|
Nitrógeno (N) | Hojas viejas se vuelven amarillas de forma uniforme | Té de compost, harina de alfalfa o purín de ortiga |
Fósforo (P) | Hojas oscuras, tallos morados, crecimiento lento | Harina de hueso, guano, té de plátano fermentado |
Potasio (K) | Bordes quemados, manchas marrones, caída temprana de hojas | Ceniza de madera, té de banana, melaza |
Calcio (Ca) | Nuevas hojas deformadas, manchas claras circulares | Cáscara de huevo fermentada, dolomita |
Magnesio (Mg) | Nervaduras verdes con amarillamiento entre ellas | Sales de Epsom, harina de dolomita |
Azufre (S) | Amarillamiento en brotes nuevos, hojas pequeñas | Compost fresco, estiércol maduro |
Hierro (Fe) | Hojas nuevas amarillas con nervaduras verdes (similar a Mg pero en hojas jóvenes) | Quelato de hierro natural o humus de lombriz activo |
🔬 Cómo diferenciar de otros problemas
Riego en exceso: hojas flácidas y amarillas desde la base
Plaga: manchas irregulares, puntos blancos, telarañas
Estrés por luz o calor: hojas quemadas o bordes rizados hacia arriba
pH incorrecto: bloquea absorción aunque haya nutrientes
👉 Mide el pH del sustrato: cannabis prefiere entre 6.0 y 6.5 en tierra. Usa medidores o tiras para ajustar con materiales naturales (vinagre, bicarbonato, etc.).
Recomendaciones:
Usa tés de compost aireado semanalmente para reactivar microvida
Aplica fertilizantes líquidos fermentados (biofertilizantes) para absorción rápida
Agrega materia orgánica al suelo entre cultivos (hojas secas, lombricomposta)
Riega con agua sin cloro (reposada o de lluvia) para no dañar microbiota
🛠️ Evita sobrecorregir: más fertilizante no siempre es mejor. Observa primero, actúa después.
En AMEM creemos que el consumo responsable viene de estar correctamente informadxs, solo así podremos sobrepasar el tabú, la desinformación y la prohibición en sí misma. Visita nuestra sección de publicaciones para obtener más información en torno a la cannabis.
📚 Bibliografía
Fundación AMEM. (2017). Manual Introducción al Cultivo Doméstico.
Lowenfels J. (2010). Teaming with Nutrients.
GrowWeedEasy y revistas especializadas 2021–2025.